Aunque no se profundizó en temas como el sector energético y cambio climático, la pasada Cumbre de Líderes de América del Norte fue en general positiva para México, Estados Unidos y Canadá; coincidieron especialistas que participaron en un webinar organizado por la Universidad de California en San Diego (UCSD) y el diario El Universal.
Pamela Starr, profesora de relaciones internacionales y diplomacia; especialista en la relación México Estados Unidos, destacó como positivo la relación cercana entre los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, luego de que en su momento el mandatario mexicano tardó en reconocer el triunfo del demócrata. Subrayó los acuerdos en materia de migración, seguridad y acciones contra el tráfico de fentanilo. Como elementos negativos comentó que no se concretaron avances en temas como el sector energético, inversión en energías limpias, cambio climático y los incumplimientos del gobierno mexicano de acuerdos previos.
Lorena Patterson, vicepresidenta de la Asociación de Asuntos Canadienses, refirió que para el primer ministro Justin Trudeau y la administración canadiense la cumbre fue buena, aunque en general la reunión no tuvo tanto seguimiento en el país. Planteó que el principal pendiente es la falta de una integración real con agenda trilateral pues en la reunión hubo tres relaciones bilaterales y no una sola. Comentó que este tipo de encuentros deben ser más frecuentes. Agregó que quedaron pendientes avances en soluciones conjuntas en rubros como cambio climático, certificación de médicos y enfermeras mexicanos para la movilidad laboral; además de la ciberseguridad.
Antonio Ortiz Mena, vicepresidente de Albright Stonebridge Group y exdirector de Asuntos Económicos en la Embajada de México en Estados Unidos, planteó que la cumbre tuvo “lo bueno, lo malo y lo feo”. En lo bueno, ubicó los acuerdos sobre seguridad-migración y que estos tópicos no acapararon la agenda; también los avances en el asunto de los semiconductores. Como lo malo, ubicó a el poco abordaje a las diferencias en el sector energético y cambio climático.
Como lo feo, señaló que el presidente López Obrador acaparó el micrófono en el mensaje conjunto y no dejó que los mandatarios estadounidense y canadiense respondieran en puntos como fentanilo. También la ausencia del fiscal Alejandro Gertz Manero en la reunión bilateral estadounidense. En la materia energética, Ortiz Mena expuso que la revisión de las diferencias seguirá en discusión a lo largo de este año y en caso de no llegar a acuerdos se podría recurrir a la instalación de un panel trilateral para dirimir formalmente los pendientes.
Sobre el futuro de la relación, los especialistas concordaron en que estará marcada por las agendas internas como la búsqueda de la reelección del presidente Biden y la sucesión presidencial en México. Refirieron que la ciberseguridad, uso de agua y cambio climático; son asuntos que se deben reforzar.
En las conclusiones se planteó que el encuentro fue exitoso para los lideres de los tres países y que a pesar de todo es bueno que haya acuerdos. Subrayaron que se debe tener memoria y seguimiento en los acuerdos y que el reto es que los tres equipos nacionales cumplan.
Tomado de Informador.mx