El Presidente de México dijo el viernes que las familias estadounidenses eran culpables de la crisis de sobredosis de fentanilo por no dar suficientes abrazos a sus hijos.
La afirmación del presidente Andrés Manuel López Obrador corona una semana de declaraciones provocadoras sobre la crisis del fentanilo, un opioide sintético traficado por los cárteles mexicanos al que se atribuyen unas 70 mil muertes anuales en Estados Unidos.
López Obrador opinó que se han perdido los valores familiares en Estados Unidos porque los padres no permiten que sus hijos no vivan en la casa suficiente tiempo. También ha negado que México produzca fentanilo.
El Presidente mexicano dijo hoy viernes en su conferencia mañanera de hoy que la causa del problema era «la falta de abrazos, de apapachos».
«Hay mucha desintegración de las familias, hay mucho individualismo, hay falta de amor, de fraternidad, de abrazos, de apapachos» en Estados Unidos, declaró López Obrador. «Ellos (los estadounidenses) deberían estar destinando fondos a atender las causas».
López Obrador ha opinado reiteradamente que son los valores familiares los que han salvado a México de la ola de sobredosis de fentanilo. Los expertos dicen que los cárteles mexicanos ganan tanto dinero en el mercado estadounidense que no ven la necesidad de vender el opioide en su propio país.
En cambio, prefieren vender metanfetaminas en México, donde la droga es más popular porque supuestamente ayuda a la gente a trabajar más.
Los llamados en Estados Unidos a declarar a los cárteles mexicanos organizaciones terroristas han enfurecido a López Obrador. Algunos republicanos han dicho que están a favor de utilizar al ejército estadounidense para reprimir a los cárteles en México.
El miércoles, López Obrador dijo que las políticas antidrogas en Estados Unidos habían fracasado y propuso que ambos países prohíban el uso del fentanilo en los tratamientos médicos, a pesar de que es muy escaso el producto que llega de los hospitales al mercado ilegal.
Las autoridades estadounidenses calculan que la mayor parte del fentanilo se produce en laboratorios clandestinos mexicanos con precursores químicos chinos.
Se han reportado casos esporádicos y aislados de frascos de fentanilo medicinal que llegan al mercado ilegal. La mayor parte del fentanilo ilegal es introducido por los cárteles en píldoras a las que se da el aspecto de medicamentos como Xanax, oxicodón o Percocet.